Llegó el día en el que tienes que entrenar a tu peque para ir al baño y para esto es importante que tengas un plan para hacerlo, pues es un cambio que marca una nueva etapa y depende de ti hacerlo una experiencia positiva o abrumadora.
Primero lo primero, lee las señales para ver si están listos para el cambio, estas son:
- Muestran interés en el baño o en ya no usar pañal
- Expresan a través de palabras o expresiones que tienen ganas de ir al baño
- Te avisan que el pañal está sucio
- Se sienten incómodos si se ensucia su pañal y trata de quitarlo sin ayuda
- Su pañal permanece seco durante al menos 2 horas
- Puede bajarse el pantalón y volver a subirlo
- Puede comprender y seguir instrucciones básicas
Una vez identificadas las señales platica con tu peque sobre este cambio, no te preocupes entienden más de lo que tu piensas y por lo general la mayoría están listos para dar el paso pues ansían sentirse como grandes.
Ahora si unos tips para ti mamá o papá que te toca la parte del entrenamiento.
- No lo obligues a hacer nada que no quiera, si aún no está listo para sentarse en el inodoro, es importante no forzarlo, pues podría generar un trauma, mejor es importante preguntarle todos los días si quiere ir al baño.
- La paciencia es tu mejor amiga. No esperes que aprenda el mismo día que tratas de enseñarle, esto requiere de días de entrenamiento y constancia.
- No le quites el pañal el día uno del entrenamiento, cámbialo por pañales entrenadores, estos lo harán sentir como grande y les darán confianza en caso de algún accidente.
- Hablando de accidentes, no seas muy duro si tiene un accidente, estos ocurren, lo importante es que le recuerdes que si tiene ganas de ir al baño tiene que ir al de grandes.
- Compra un asiento con adaptador infantil, este le hará sentir mucha confianza en sí mismo, pues estará yendo al baño como sus papás. El asiento PequePlus de Bemis o en NextStep 2 le darán la seguridad que buscan pues cuentan con adaptador infantil.
- Trata de establecer una rutina.
- Festeja cada logro, para ti puede ser una actividad del día a día, pero para tu pequeño es un gran logro.
Un último consejo es que una vez que empiecen el entrenamiento, no den marcha atrás para que tu pequeño no se confunda. Procura empezar cuando no sólo él esté listo, sino tú también y tengas el tiempo para hacerlo.